La palista ceutí Isa Contreras ya está en Tokio contando los días para su estreno en los Juegos Olímpicos, en la prueba de K1 500. Pero la piragüista de la selección española no es la única caballa en la capital nipona. Allí se encuentra también Foad Buchta, en su caso como entrenador de un palista de Belice que también va a competir en los Juegos.