Aquilino Etxarri avisa que la AD Ceuta FC dará guerra a la Real en el Murube. Foto: Arizmendi

Aquilino Etxarri (Pasajes de San Juan, 1969) dejó su huella en la ciudad autónoma cuando militó en la AD Ceuta dos temporadas a finales de los 90. El centrocampista vasco fue uno de los jugadores más destacados del plantel que consiguió el ascenso a Segunda B con Álvaro Pérez en el banquillo en la temporada 97-98. Etxarri, que militó tres temporadas en el Sanse, filial de la Real Sociedad, ha concedido una entrevista a El Diario Vasco para hablar del duelo copero entre el Ceuta y la Real.

Han pasado más de 21 años del ascenso de la Asociación Deportiva Ceuta a la división de bronce, pero en la memoria de los aficionados ceutíes están los nombres de Ariel Romero, Gorri, Pablo Sánchez, Quevedo, Garmendia, Etxarri, Asencio o Pepe Parrado que brillaron con luz propia en el campeonato regular en el grupo X de Tercera y en la liguilla de ascenso, donde el Ceuta compartió grupo con el Poli Ejido, el Guadalajara y el Villafranca.

Etxarri no tardó en ganarse el cariño de la afición por su poderío físico, su entrega y... sus goles, fue el segundo máximo goleador del Ceuta, marcando en el partido decisivo un tanto de cabeza ante el Villafranca en el Murube.

El futbolista vasco continuó en el equipo blanco en la temporada 98-99, pero perdió protagonismo, al igual que otros compañeros que lo habían bordado el curso anterior. Aquella campaña, tras la renuncia de Álvaro Pérez por motivos laborales, la empezó Rafael Alcaide 'Crispi', un entrenador que apostaba por el 3-5-2, lo sustituyó su segundo Paco Toledo que solo estuvo cinco partidos hasta que llegó el paraguayo Cayetano Re para intentar meter a la AD Ceuta en el play off quedándose a un paso.

– ¿Qué puede contarnos del Ceuta?

– Hasta el año pasado estuvo dirigiendo al equipo un ex compañero de mi etapa en el Ceuta, Juan Ramón Martín. Respecto al equipo actual, poco puedo contarte a nivel técnico o táctico. Descendió hace un tiempo de Segunda B a Tercera y hubo una especie de fusión entre dos equipos de la ciudad por la crisis económica. Actualmente se encuentra en la zona alta de su grupo de Tercera, un grupo con un nivel muy alto. Tiene una afición muy fiel. El año que logramos el ascenso venían a vernos cerca de 6.000 personas y cuando nos tocaba viajar incluso cerca de 2.000. Puede que ahora haya bajado un tanto en cuanto a seguidores. Durante mi etapa en el Ceuta el césped era de hierba natural, ahora es artificial.

– ¿Cuáles son sus puntos fuertes?

– Como ocurre en estas categorías, el fútbol es mucho más trabado. Imagino que el Ceuta esperará atrás a la Real para buscarle en alguna contra y dar la sorpresa.

– ¿Puede influir el césped artificial?

– Por supuesto. La Real viene de jugar en campos de hierba natural y pasar a uno artificial se nota en todo. En el bote, el toque...Es un hándicap. La Real se tendrá que adaptar y jugar en el campo que le toque. Tiene calidad suficiente para jugar en cualquier estadio. Estoy seguro que el Ceuta le dará guerra.

– ¿Le gusta este formato de Copa?

– Mucho. Da la oportunidad a equipos y ciudades pequeñas de enfrentarse contra rivales de Primera División. Para los jugadores de Tercera y Segunda B es algo muy importante.

– Imagino que guardará algo de cariño al equipo ceutí, ¿le gustaría verle en la siguiente eliminatoria?

– Soy socio de la Real y a quien me gustaría ver en la siguiente ronda es al equipo de Imanol. Ahora bien, si es el Ceuta el que elimina a la Real no me daría tanta pena, puesto que guardo mucho cariño y grandes recuerdos de mi etapa allí.

– ¿Qué recuerdo guarda de su etapa en Ceuta?

– Hubo una fusión entre dos equipos de la ciudad. Apostaron por crear un equipo competitivo y logramos el ascenso. La temporada anterior a mi llegada ya habían empezado por crear una escuadra potente, llegando a fichar a dos jugadores internacionales. Por aquel entonces también había dos jugadores guipuzcoanos: Gorri de Irún y Luis Garmendia de Beasain. Coincidí con Garmendia en el Sestao y fue él quien me llamó para ir al Ceuta. Por aquel entonces estaba en el Castellón y era bajar de categoría, pero por una apuesta más fuerte y competitiva. Finalmente conseguimos el ascenso a Segunda B

– ¿Puede la Real llegar lejos esta temporada en el torneo del KO?

– Dependerá de los cruces, pero por plantilla y el rendimiento que está ofreciendo no va a ser. Se puede soñar con algo grande.