Dani Ramos fue uno de los protagonistas del partido del pasado sábado entre la UA Ceutí FS y el Peligros FS, que terminó con victoria unionista por 8-3. Para el jugador caballa fue “raro volver a casa sin jugar con mi club, pero estoy bastante contento con poder estar en el Peligros y en la ciudad de Granada en la que estudio, aunque el resultado no fue bueno y toca seguir peleando”.
Dani Ramos debutó con el Ceutí en Segunda B hace tres temporadas, en su segundo año de juvenil. Luego se marchó a la capital de la Alhambra para estudiar INEF y la pasada campaña no jugó en ningún equipo federado. “Jugué el Campeonato Andaluz Universitario con Granada, pero me picó otra vez el gusanillo y decidí volver a la competición federada”, comenta sobre su incorporación al Peligros, un recién ascendido a Segunda B.
El equipo granadino demostró en la pista del ‘Guillermo Molina’ que tiene “una mezcla buena entre gente experimentada y joven que creo puede salir bien”.
Ante el Ceutí, hubo “momentos en los que tuvimos el control, el dominio, y le pusimos las cosas difíciles a un equipo experimentado que sabe lo que hace como es el Ceutí”.
Ramos, que fue llamado para entrenar con la selección española sub-18 y que ha jugado con la selección andaluza sub-19, ha acabado ya su etapa juvenil. Ahora, su objetivo es terminar sus estudios y espera volver a defender algún día los colores del Ceutí: “Creo que sí, es mi idea. Si tengo la puerta abierta y me veo con ganas, seguro que volveré”.